Bienvenido al casino
de tu vida, donde jugarselo todo puede ser tu ruina.
Entras, las luces te ciegan, comienzas a sentir una sensación
de euforia recorriendo tu cuerpo, son las luces, quizás la melodía de las
maquinas, solo sabes que te empiezan a sudar las manos. Lo llevas todo encima,
piensas que nada puede fallar, que la suerte esta de tu parte. Pides esas
fichas como pase para llegar a la cima, nada puede pararte, eres invencible.
Empiezas a jugar, poco a poco para no desgastarte, todo va
bien, la suerte te sonríe, todo parece fácil, no sientes preocupaciones. Sigues en las mismas, en el mismo juego, para
no tropezar ya que al haber aprendido a jugar ya nada puede ir mas, pero la monotonía
se cierne sobre ti, necesitas mas y te levantas para seguir adelante aunque con
inseguridad por esa comodidad pasada. Llegas a la ruleta, te sientas, la
observas y ves como los demás juegan. Tienen una serenidad admirable, pierden y
siguen jugando, ganan y sus expresiones siguen siendo las mismas. Te inquieta
tanta incertidumbre, y decides probar . Mientras te planteas tus posibilidades
la ruleta sigue girando, no se para, y premeditadamente apuestas, poco, para
asegurarte, mantenerte al alcance de tus posibilidades y con suerte esperas
acertar.
Esta vez la suerte ha estado de tu parte, te sientes bien
con ganas de seguir jugando, vuelves a apostar, esta vez un poco mas alto, todo
es cuestión de suerte. Una vez mas, la suerte se muestra generosa y tu,
demasiado eufórico, pero todavía te mantienes firme. Pese a esa firmeza ya no
piensas con claridad, todo empieza a moverse rápido , y apuestas sin pensar. La
ruleta gira y gira, y no aciertas, bueno, ha sido la primera caída ,pero habías
apostado demasiado y ya has perdido lo ganado en una sola tirada. Levantas la
cabeza con dignidad, pero nadie esta atento , siguen con su juego , adictos a
caer y levantarse. Tras varios intentos y ya con los bolsillos vacios comienzas
a desesperarte, como has podido perderlo todo en tan poco tiempo? Te empiezas a dar cuenta de que tu nunca has
estado jugando a la ruleta, la ruleta ha estado jugando contigo, la ruleta y el
azar, la suerte y la perdición.
No has sabido canalizar tus sentimientos, ni tampoco
dosificarlos, no has sabido que para todo hay un momento y lo has apostado todo
a uno sin saber lo que te esperaba en un futuro.
Round and round it goes again, bet on it and don't look back.
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